Retomamos nuestra agradable labor desde tierras riojanas. Tras haber disfrutado de La Montesa, pasamos a probar un vino de gama más alta de la misma bodega, Palacios Remondo.Es de capa media y color picota. En nariz no destaca por su intensidad, aunque deja buena fruta madura, toques especiados y a café de la madera, así como un tono mineral de fondo.
En boca destaca más. Muy aromático, de taninos presentes aunque dóciles y, sobre todo, muy largo.
Le encontramos un pero: su precio. Hemos pagado 21 euros por este vino y, por ejemplo, La Montesa valía más o menos la mitad. Y este no está el doble de bueno. ¡Salud!
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