En la copa este Pithos tiene una capa baja, casi como un rosado, con un bonito color cereza. Al olerlo se percibe el aroma familiar de muchos vinos de agricultura biodinámica, ese olor dulzón al hollejo de la uva, muy frutal. Hay también notas florales (flores secas, pétalos de rosa), especias dulces (anisado) y azúcar tostada (algodón de azúcar). Huele muy bien desde el principio y con intensidad.
En boca es fresco, con un paso aromático (caramelo de violeta) y ligero. Aquí se nota la mineralidad. Tiene un puntito salado final que nos gustaría pensar que proviene de la tinaja donde se ha elaborado este vino.Es una experiencia muy interesante. A los románticos de la Historia incluso se les puede pasar por la cabeza que esto es lo más parecido en la actualidad al vino que se bebía en la antigua Roma. Os animamos a probarlo. Lo podéis comprar en la Vinoteca Tierra por un precio entre 10 y 20 €.
¡Salud!
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