EN INSTAGRAM

Sígueme también en Instagram

domingo, 24 de julio de 2011

LES LONGEROIES 2008. Pinot Noir. Borgoña. Francia.



Volvemos a Borgoña para adentrarnos en su corazón, en la Cote d`Or; donde un microcosmos de parcelas como la que nos ocupa hoy, Les Longeroies, ha hecho de este espacio una de las regiones vinícolas más prestigiosas del mundo.



Centrándonos en este vino, elaborado por Bruno Clair, se muestra con capa baja y un ribete fucsia que denota su juventud.




Nada más olerlo reconocemos a la Pinot noir. Hay una delicada y deliciosa fruta roja (fresa) que no esconde su complejidad. Hay notas florales, balsámicas y, englobando el conjunto, una mineralidad que notamos en los recuerdos de tiza. La crianza en madera apenas se percibe, deja todo el protagonismo a la uva y a su suelo.





Al probarlo apreciamos de nuevo su juventud. Una acidez muy destacada nos sugiere que este vino tiene una larga vida por delante. A partir de ahí todo es placer. Un vino sedoso, elegante, aromático. Todo está en su sitio. Nada sobra. Nada falta.


La parcela de la que surge tiene poco más de una hectárea. Dice la página web de la bodega, que de ahí nacen vinos menos tánicos que los de las parcelas vecinas. Y lo cierto es que nos ha sorprendido esa suavidad que nos ha llevado a preguntarnos cómo se elabora, ya que la crianza en barrica la suponíamos. Por cierto, el porcentaje de barrica nueva es significativamente más reducido que, por ejemplo, la mayoría de vinos españoles que vamos conociendo. Y nos gusta más esa fórmula, por cuanto que no enmascara la esencia del vino. Su precio, poquito más de 30 euros en la Vinoteca Tierra, no es apto para todos los bolsillos; pero es todo un regalo para los sentidos. Un vino que sirve de perfecta introducción al mundo de los borgoñas, que hace gala de la sencilla complejidad de los grandes vinos.


¡Salud!

No hay comentarios:

Publicar un comentario