Volvemos a catar un vino de una bodega bien representada en nuestro blog. En este caso vamos con su joven monastrell, que ha tenido una crianza de cuatro meses en barrica de roble francés y americano. 
De capa alta, como muchos de sus hermanos; en nariz la fruta madura está bien presente, acompañada de notas tostadas y especiadas, junto a algún recuerdo mineral.
En boca se muestra goloso, con la virtud de que la acidez compensa su generosa carga alcohólica. El paso es sabroso y placentero.Queda claro que la bodega sabe cómo hacer un vino capaz de competir airosamente en un mercado global. Una apuesta segura para quien quiera un vino agradable de beber a un precio más que atractivo, ya que ronda los 6 euros.
¡Salud!
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