Recibimos con agrado en nuestro blog a una nueva variedad, la sauvignon gris, y a una de las muchísimas denominaciones francesas; en este caso, y dentro de Borgoña, presentamos a la denominación Saint-Bris. Lo hacemos con un vino que lleva la autoría de la bodega Goisot, y que cuenta con el sello Demeter de agricultura biodinámica.
Pues bien, este blanco muestra aromas herbáceos y florales (recuerdos de heno, de hinojo), acompañados de fruta blanca (pera, manzana), y notas minerales.
En boca todavía nos gusta más. La acidez es excelente, y combina a la perfección con cierta untuosidad, un punto de sequedad y un ligero amargor final.
Por vía retronasal las notas de manzana están muy presentes junto a los recuerdos minerales. El vino deja un recuerdo que perdura mucho tiempo, muchísimo tiempo.
Un vino estupendo que nos costó unos 17€ en la Vinoteca Tierra, de Madrid. Lo catamos en día-flor (en teoría el mejor día para la cata).
¡Salud!
Por vía retronasal las notas de manzana están muy presentes junto a los recuerdos minerales. El vino deja un recuerdo que perdura mucho tiempo, muchísimo tiempo. 
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